Brasil: saudade

En Brasil, la línea que divide el país no es el límite entre el descarado mundo de los ricos y el interminable infierno de los pobres.
Para mí, existe un Brasil de proporciones gigantescas, adornado de mitos tropicales; un mundo donde cada imagen tiene un adjetivo desbordante: danzas frenéticas, playas ardientes, vegetación exuberante, pobreza extrema…

Y detrás de él, está el Brasil de las pequeñas cosas, el del silencio que se oye bajando el río Amazonas, el del cielo abierto a través de las casas bahianas ya inexistentes, el de los muros desteñidos por cientos de años de brisa salada, un Brasil de ritmo lento donde entra la saudade…